17 de Febrero - Bienvenido a las grandes ligas
Audio Devocional "Crezcamos de Fe en Fe" - Ministerios Kenneth Copeland - A podcast by Kenneth y Gloria Copeland
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17 de Febrero Kenneth Bienvenido a las grandes ligas «Bienaventurados serán ustedes cuando por mi causa los insulten y persigan, y mientan y digan contra ustedes toda clase de mal. Gócense y alégrense, porque en los cielos ya tienen ustedes un gran galardón; pues así persiguieron a los profetas que vivieron antes que ustedes». (Mateo 5:11-12) Cuando sufras persecución, no andes por ahí quejándote. No pierdas tu tiempo sintiendo lástima de ti mismo. A pesar de lo que puedas pensar, esa persecución no ha venido porque el diablo encuentra placer en fastidiarte. Ha venido porque te has transformado en una amenaza para él. Y además, ha venido porque has puesto la Palabra en tu corazón, y él sabe que si no consigue quitártela, le ocasionarás más problemas de los que él puede manejar. Por eso, ¡regocíjate! La persecución significa que estás jugando en las grandes ligas. Quiere decir que el diablo te toma tan en serio, que ha enviado a sus mejores jugadores ¡con la idea de sacarte del juego! Los jugadores que llegan a las finales de las grandes ligas de fútbol no buscan la forma de no jugar esos partidos, ¿correcto? Ellos no dicen: “¡Ojalá no tuviera que estar en esa final! Esos son los jugadores más grandes y experimentados del mundo. Quizás me enferme y no tenga que jugar”. ¡No! Ellos anhelan la oportunidad―y dicen: “Ya verán. He luchado toda mi vida para llegar hasta aquí, ¡y ahora les mostraré que soy el mejor!”. Es esa misma actitud la que deberías tener cuando el diablo te desafíe. Debe aceptar ese desafío con gozo, sabiendo que la victoria es tuya. Después de todo, tu Dios es poderoso para sacarte adelante. Él nunca se detiene a preguntarse si tiene los recursos necesarios para solucionar las dificultades que enfrentas. Él sabe que puede destruir cualquier cosa que el diablo envíe en tu contra. Así que, cuando la persecución venga, confía en Dios y ¡regocíjate de saber que ahora estás jugando en las grandes ligas! Lectura bíblica: 1 Pedro 4:12-19