16 de Agosto - Un fundamento firme

16 de Agosto Kenneth Un fundamento firme «Éste es mi mandamiento para ustedes: Que se amen unos a otros» (Juan 15:17) En Lucas 6:47-48, Jesús dijo: «Les voy a decir como quién es el que viene a mí, y oye mis palabras y las pone en práctica: 48 Es como quien, al construir una casa, cava hondo y pone los cimientos sobre la roca. En caso de una inundación, si el río golpea con ímpetu la casa, no logra sacudirla porque está asentada sobre la roca». Probablemente ese pasaje sea conocido para ti. Pero hoy quiero que hagas algo diferente con él. Quiero que lo unas con lo que Jesús dijo en Juan 15:17: «Éste es mi mandamiento para ustedes: Que se amen unos a otros». Amor. Esa palabra resume todo lo que Jesús nos ordenó que hiciéramos. Si edificas tu vida sobre el amor, ni siquiera las tormentas más violentas de este mundo podrán sacudirte. El amor te hará resistente en todas las áreas de tu vida. Si edificas tu familia sobre el amor, podrás recuperar a los que el diablo te ha robado. Tú los puede ganar para Jesús con el amor de Dios. Si edifica tu negocio o empresa sobre el amor, prosperarás más allá de lo que puedas imaginarse. Yo tenía un amigo que hizo eso. Montó un negocio de radio y televisión en su iglesia. Él quería comprar una emisora de radio que pertenecía a un judío, y le ofreció un precio tan bueno por ella que éste se quedó sorprendido. «¿Por qué me has ofrecido un precio tan estupendo?», le preguntó el propietario judío. Y mi amigo le dijo: «Porque la Palabra de Dios dice que si te bendigo, Dios me bendecirá. Por tanto, voy a procurar obtengas la mejor parte de este negocio». Antes de que concluyeran el negocio, el judío dueño de la emisora había recibido a Jesucristo como el Señor de su vida. Los dos prosperaron y predicaron el evangelio de Jesucristo por medio de la emisora. Cuando el amor reina, ¡la prosperidad fluye! Decídete hoy a andar en amor y a edificar tu casa sobre la roca. Así, cuando las tormentas de la vida azoten el hogar, el trabajo o cualquier otra cosa; podrás estar tranquilo y seguro en el conocimiento de que el amor nunca deja de ser. Lectura bíblica: 1 Corintios 13:8-13